Siento una suave brisa que me hace estremecer y un
ligero aroma que huele muy bien, está todo tan tranquilo, que siento hasta a
los pájaros el ruido embellecer, no padezco ni frío ni calor, todo es
tranquilidad a mi alrededor. Esta burbuja que me rodea es tan bonita, se
respira tanta paz, que me da miedo avanzar, que temo explorar mucho más allá de
esta realidad, ¿Y si me pierdo? ¿Y si no vuelvo? ¿Y si tropiezo?
Tantas preguntas y tan pocas respuestas podemos hallar, que para ello debemos a estar dispuestos a escuchar solo la verdad.
Tantas preguntas y tan pocas respuestas podemos hallar, que para ello debemos a estar dispuestos a escuchar solo la verdad.
¿Qué pasa si te pierdes?: Es tan fácil como dejarse
llevar, ir de aquí para allá, probando e intentando pero siempre teniendo un
rumbo fijo en mente, hay algo que aunque no vemos nos guía a un lugar
determinado, que por mucha vueltas que demos solo hay un camino correcto.
Créeme sabrás cual es en cuanto lo fijes como objetivo.
¿Si no vuelves? Como bien dicen, todos los caminos
conducen a Roma, eso sí, encontraras obstáculos, paredes altas o muros que te
parecerá infranqueables, en ese camino en el que temías perderte, aprendiste
algo que se llama esfuerzo, te será muy útil. Pues sin ese él, no hay
recompensa. Y nada sabe mejor como una recompensa después de tanto esfuerzo
como alcanzar ese éxito.
¿Tropezar? Si a estas alturas temes eso, es que el
objetivo, esfuerzo y el éxito que te has marcado, no te han enseñado nada, pero
esa experiencia adquirida ya te ha enseñado más de lo que crees. Fijarte un
camino es saber tu objetivo, marcarte unas metas y conseguirlo es esfuerzo y
éxito. Tropezar es obligatorio y levantarse es opcional. Si caemos nos volvemos
a levantar y lo volvemos a intentar porque debemos admitir que aunque cada
caída es más dura que la anterior, el limite lo marcamos nosotros, nuestras
metas, éxitos y logros estarán limitados por nosotros mismos.
Si he resuelto tus dudas, tus preguntas o tus
incógnitas, Bienvenido al camino del éxito, donde todo es posible y donde el
verdadero cambio, empieza por uno mismo.